Tiempo Boca Abajo con su Bebé en la NICU: Cómo Hacerlo y por qué es Importante
El tiempo boca abajo es una forma estupenda de interactuar con el bebé a la vez que le ayuda a mejorar su fuerza y movilidad, y también a prevenir el aplanamiento de la cabeza. ¿Cómo participa en el tiempo boca abajo con su bebé en la UCIN y por qué es importante?
¿Qué es la hora boca abajo?
El tiempo boca abajo es cuando un bebé despierto se tumba boca abajo y juega con juguetes, con él mismo o con un cuidador. Es la principal forma de actividad física recomendada para bebés de cero a seis meses de edad por la Organización Mundial de la Salud y la Academia Americana de Pediatría.
¿Por qué es importante el tiempo boca abajo?
Pasar tiempo boca abajo todos los días con tu hijo beneficia su desarrollo motor fino, motor grueso, de resolución de problemas y socioemocional. Según una investigación de la Academia Americana de Pediatría (2020), el tiempo boca abajo
- Fortalece los músculos de la cabeza, el cuello y la parte superior del cuerpo
- Mejora la capacidad para alcanzar objetos
- Mejora el control de la cabeza
- Previene el aplanamiento de la cabeza
- Mejora la capacidad de mover los brazos en diferentes posiciones (por ejemplo, llevar las manos a la boca)
- Mejora la capacidad de mover las piernas en diferentes posiciones (por ejemplo, dar patadas)
- Mejora la capacidad de rodar
- Mejora la capacidad de gatear
- Desarrolla la capacidad de girar la cabeza y mirar cuando se le habla
- Reduce el Índice de Masa Corporal (IMC)
Ideas para participar en la hora del vientre
- La hora del vientre debe ser divertida. Aquí tienes algunas ideas para participar en la hora boca abajo con tu bebé.
- Acuesta a tu bebé boca abajo sobre una mantita.
- Utiliza mantas de distintos colores y texturas para despertar el interés del bebé.
- Túmbate boca abajo junto a tu bebé o frente a él y cántale, hazle muecas o ponle música.
- Coloca un espejo en el campo visual del bebé para distraerle y permitirle ver diferentes expresiones faciales.
- Coloca almohadillas o una toalla enrollada debajo de la zona del pecho y las axilas del bebé para aliviar la tensión muscular y facilitar que empuje con los brazos para mantener el cuerpo erguido.
- Mueve sonajeros o marionetas delante de tu bebé para animarle a mirar los juguetes mientras los mueves y ayudarle a practicar el seguimiento de objetos con los ojos.
- Práctica sujetar y agarrar objetos para que empiece a desarrollar el control de las manos. Con el tiempo, aprenderán a coger objetos enroscando la parte superior de los dedos para acercarlos.
¿Cuánto tiempo debe durar el tiempo boca abajo?
La Academia Americana de Pediatría recomienda de 3 a 5 minutos, dos o tres veces al día, aumentando gradualmente a medida que el bebé disfrute de la actividad. Aunque no existe una regla general concreta sobre la duración del tiempo boca abajo, intente dedicar 10 minutos al día por cada mes de edad ajustada. Por ejemplo, un bebé de dos meses de edad ajustada debería estar boca abajo unos 20 minutos al día.
Ten en cuenta que el tiempo boca abajo es un verdadero ejercicio para los músculos del bebé, por lo que es importante no excederse. Busca señales que indiquen que tu bebé está listo para parar, como el llanto o el apoyo de la cabeza en el suelo.
¿Cuándo debe estar boca abajo?
Hazlo cuando tu hijo esté despierto después de la siesta. Si tu bebé llora o apoya la cabeza en el suelo, puede estar intentando decirte que está cansado. En ese caso, termina el tiempo boca abajo y vuelve a intentarlo más tarde.
Dado que se considera tiempo boca abajo cualquier momento en el que el bebé está boca abajo, puedes empezar incluso en la UCIN durante los cuidados canguro, cuando el bebé está tumbado sobre tu pecho. Una vez en casa, el tiempo boca abajo puede realizarse en momentos naturales a lo largo del día. Puede ser tan sencillo como que tu hijo se tumbe sobre tu pecho mientras tú estás tumbada o sentada, o tumbarle boca abajo después de cambiarle el pañal o bañarle.
El tiempo boca abajo supone un duro trabajo para los músculos del bebé, por lo que incorporar juguetes o juegos a la actividad puede ayudar a distraerlo o entretenerlo, del mismo modo que puedes escuchar música cuando haces ejercicio. Si a tu hijo aún no le interesa jugar con juguetes, ¡no pasa nada! Puedes intentar ponerte a la altura de los ojos de tu bebé y hacerle muecas divertidas o darle un espejo para que se mire. Con el tiempo, puedes pasar a juguetes con luces parpadeantes o sonidos para que el tiempo boca abajo sea más divertido.